Por fin hemos conocido un avance muy esperado en el mundo de la ciencia, el descubrimiento del genoma del trigo, en concreto de la variedad Triticum aestivum. Es una gran noticia ya que se consideraba un reto muy difícil de conseguir porque el trigo esta formado por 17.000 mil millones de pares de bases, seis veces más que el genoma humano.

Con este descubrimiento se abren nuevas puertas para poder desarrollar estrategias de creación de variedades nuevas con características que ayuden a mejorar los cultivos. Además también se ha conseguido aislar los genes ancestrales del trigo que permitirán seguir trabajando en el desarrollo de nuevas variedades que sean más productivas, más resistentes a plagas y a condiciones adversas, y con mejores características organolépticas.

Se ha llegado a esta meta, gracias a la trabajo de un conjunto de científicos de todo el mundo y para conseguirlo han utilizado nuevas técnicas como cortar el ADN al azar en muchos segmentos que posteriormente han estado leído, formando poco a poco el mapa completo del genoma del trigo.