massa mare

Como bien sabéis la masa madre se compone de hongos unicelulares y bacterias que viven en simbiosis, formando una comunidad diversa, capaz de fermentar los azucares presentes en la harina.

Por tanto es un ser vivo y es muy difícil matarlo, como podemos comprobar en el siguiente post del blog Foodsionando, en el que muestran que dejaron la masa madre a temperatura ambiente durante los tres meses de verano y después la pudieron utilizar para hacer pan otra vez.

Está claro que la parte superior de la masa madre quedó negra por las bacterias y la levadura súper fermentados, pero después de sacar esta parte y de alimentar la masa durante unos días, la masa madre se recuperó y pudieron utilizarla para realizar pan.